Para las personas mayores con movilidad reducida, el levantamiento puede ser un desafío difícil y potencialmente peligroso. Sin embargo, con los consejos correctos y la asistencia adecuada, es posible levantar a una persona mayor con seguridad y sin riesgos innecesarios. En este artículo abordaremos los consejos y técnicas que puede utilizar un cuidador especialista en atención domiciliaria o un familiar para levantar a una persona mayor con movilidad reducida.
Consejos para levantar a una persona con movilidad reducida
Levantar a una persona mayor con movilidad reducida puede ser una tarea desafiante, especialmente si no se usa la técnica adecuada.
Antes de levantar a una persona mayor con movilidad reducida, es importante asegurarse de que estén conscientes y listos para ser levantados. Habla con ellos y explícales claramente lo que está sucediendo.
Evalúa la capacidad de la persona mayor para levantarse
La persona mayor debe estar posicionada correctamente antes de levantarse. Esto significa que deben estar sentados en el borde de la cama o en una silla, con los pies apoyados en el suelo.
Antes de comenzar cualquier intento de levantar a una persona mayor con movilidad reducida, evalúa su capacidad para hacerlo.
Algunas personas mayores pueden ser capaces de participar activamente en el proceso, mientras que otras pueden requerir una asistencia más intensa.
Usa una técnica adecuada para levantar a una persona con movilidad reducida
Al levantar a una persona mayor con movilidad reducida, es crucial emplear la técnica correcta para evitar lesiones tanto para el cuidador como para la persona mayor.
Asegúrese de que la persona esté en una posición cómoda y segura antes de intentar levantarla. Ante todo evita levantar desde una posición agachada o doblada.
Proporciona un soporte adecuado
Para ayudar a una persona mayor a levantarse se ha de proporcionar un soporte adecuado en todo momento.
Esto puede incluir la colocación de almohadas o cojines detrás de la espalda y la cabeza de la persona, o el uso de un dispositivo de levantamiento como una silla de ruedas. Además, asegúrate de que la persona esté apoyada en todo momento mientras está en pie.
Los equipos de apoyo
En algunos casos, puede ser necesario utilizar equipos de apoyo para levantar a una persona mayor con movilidad reducida. Los equipos de apoyo pueden incluir andadores, barras de apoyo o cinturones de seguridad.
Si la persona mayor tiene dificultades para mantenerse erguida o no puede soportar peso por sí sola, se puede usar un arnés de levantamiento para ayudar con el proceso. El arnés debe colocarse debajo de los brazos de la persona mayor y ajustarse de manera segura antes de levantarse.
Previo intento, comprueba que la persona mayor esté cómoda y segura antes de usar cualquier equipo de apoyo.
Considera la ayuda de un profesional de atención domiciliaria
Si te sientes incómodo o inseguro al levantar a una persona mayor con movilidad reducida, o no puedes conciliar vida laboral con el cuidado familiar, considera contratar a un profesional de atención domiciliaria.
Los profesionales de Unidos a Ti están capacitados para ayudar a las personas mayores con todas las actividades de la vida diaria, incluyendo el levantamiento si se ven limitados en su movilidad.
La atención especializada a domicilio puede ofrecer una serie de ventajas significativas para levantar a personas mayores con movilidad reducida.
- Seguridad: Los profesionales de ayuda a domicilio están capacitados para levantar a personas mayores con movilidad reducida de manera segura y sin riesgos de lesiones tanto para la persona mayor como para el cuidador.
- Comodidad: La atención domiciliaria permite que la persona mayor sea levantada en la comodidad de su propio hogar. Esto puede ser especialmente importante para aquellos que pueden sentirse incómodos o ansiosos en un entorno hospitalario o de cuidados a largo plazo.
- Personalización: Adaptamos las técnicas de levantamiento específicas para el nivel de movilidad reducida de la persona a cuidar. Si fuera necesario, emplearemos equipos de apoyo específicos homologados.
- Mayor independencia: Al evitar una mudanza a una residencia de cuidados a largo plazo, pueden seguir participando en sus actividades diarias y disfrutar de su entorno familiar.
- Flexibilidad: Los servicios de atención domiciliaria pueden ser programados según las necesidades individuales de la persona mayor de modo que la familia puede elegir si desea ayuda a domicilio puntual o bien contratar una interna que acompañe al familiar las 24 horas del día.
Si se encuentra en esta situación, y desea conocer cómo trabajamos, no dude en concertar una cita privada o acuda a nuestras instalaciones en el centro de Valladolid.